Una nueva vida para Cabrera
Los últimos días de la actualidad del equipo no ha dado para mucho, en concreto desde la llegada de José Valverde. Algo habitual en la offseason, nada nuevo.
Sin embargo las últimas informaciónes de los Tigers no están relacionadas puramente con aspectos deportivos. El caso es que Miguel Cabrera abandonó esta pasada semana la clínica de desintoxicación donde estaba recibiendo un tratamiento contra el alcohol, que trajo más de un disgusto a su familia y a los aficionados al final de la pasada temporada regular. Ante los medios dijo que empezaba ahora “una nueva vida y una nueva temporada”
Los acontecimientos ocurrieron durante la última serie de liga ante los Medias Blancas, cuando Cabrera montó al parecer una fiesta en su casa que acabó con el primera base tocado por el alcohol y con una discusión con su mujer, la cual llamó a la policia. El venezolano acabó en comisaría y un Dombrovski encendido tuvo que hacer de padre e ir a buscarle.
En los dos siguientes partidos, el primero el mismo día y en los cuales Detroit forzó el desempate in-extremis, Cabrera hizo un 0 de 7 en sus turnos de bateo pero lo cierto es que no le hubiese dado ni a un balón de playa con la resaca que tendría.
El resto ya lo sabemos. Dejamos pasar una ventaja de tres partidos en los últimos cuatro, de siete en el último mes y de hasta de diez. El liderato de la Central nos duró desde mayo y lo perdimos en el penúltimo partido. Y aunque el de Maracay jugó bien el desempate ante los Twins en un partido épico, no consuela. Lo que ocurrió fue lamentable y todo el equipo tiene su responsabilidad.
Otra noticia fue la donación de 100.000$ de Magglio Ordóñez para ayudar al drama de Haití. Un gran detalle del último campeón de bateo de los Tigres que en su país es tan querido como odiado por su apoyo al presidente de venezolano Hugo Chávez. Mientras unos destacan sus contribuciones a las comunidades más necesitadas, otros critican sus mansiones en Miami y que no pisa tanto Venezuela como debiera debido a la inseguridad. Lo que está claro es que cada uno con su dinero hace lo quiere.
Hola amigo. Sorprendente que un profesional de gran talla de las Grandes Ligas, como Miguel Cabera, juegue con su carrera deportiva y además con las ilusiones de sus compañeros y toda una afición, de la manera que lo hizo al final de la temporada pasada. Porque estaban en un momento delicado de la temporada, y su gesto fue muy poco profesional.
Pero todo el mundo merece una segunda oportunidad, y ahora es el momento de redimirse.
Saludos.
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